Vive el podcast un segundo aire

Productores comparten su experiencia en el Encuentro Internacional de Periodistas

En los últimos tiempos, el podcast experimenta un nuevo aire, pues de ser considerado un archivo para las producciones radiofónicas, ya que no se hacía contenido específico para transmitir por esta vía, hoy existe un mayor número de producciones y de consumidores de contenido.

Sobre este tema, especialistas en la materia hicieron un recorrido por la historia de este concepto y compartieron su experiencia en la charla “Podcast GDL”, que formó parte de las actividades del XV Encuentro Internacional de Periodistas (EIP), en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL).

“Esto no es radio” es el nombre del podcast que dirige Fernando Hernández “Micro”, uno de los pioneros en esta área, quien expresó que estamos en una segunda era del podcasting en el mundo, y México siempre ha estado a la par de lanzamientos y consumo de podcast muy centralizado.

“De 2010 para acá, en Estados Unidos de América hay más de 700 mil podcasts activos y 29 millones de episodios en más de 100 idiomas. El término podcasting está mucho más familiarizado entre la población”, indicó.

En el caso de México, dijo que una consultora hizo un estudio en 2018 que señalaba que ya son 12 millones de escuchas, casi el triple de lo que había en 2014, y la proyección es bastante optimista para 2023, donde habrá 38 millones de escuchas.

“Si está creciendo la audiencia en México será muy atractivo para anunciantes, habrá un crecimiento exponencial y si hay más escuchas, hay más demanda, inversión y oportunidad de profesionalización para que se pueda vivir de esto”, precisó “Micro”.

Tania Ochoa, con el podcast “Robotania”, se dedica a la promoción de la cultura y el entretenimiento. Su proyecto empezó como una especie de colectivo de 20 personas con una producción diaria.

Un día pensó en platicar sobre lo que a ella le gustaba y su primer podcast fue trasmitido el 30 de julio de 2009. Recordó que fue horrible, tardó en grabarlo cuatro horas, lloró, se enojó, pero decidió seguir y ya lleva diez años en este medio.

“En la radio nunca hay presupuesto, y pensé que también tenía que vivir y me pregunté cómo se hacía un podcast y vi que no era tan difícil. Ya ahora es más sencillo, no tan caro, y desde un teléfono celular puedes grabar un audio y subirlo”, apuntó.

Compartió que su fórmula ha sido posicionarse entre gente que le consuma y que confíe en que lo que ella recomienda es bueno.

Susana Ochoa, activista, política y feminista, del podcast “Hilando fino”, recordó que tardó ocho años en tener un podcast, que ahora le permite compartir sus ideas y sostener conversaciones con personas de las que aprende mucho.

“Nos permite democratizar el acceso a los medios de comunicación. Te permite ir construyendo opinión pública sobre las coyunturas en el país. Siempre quise hacer un podcast feminista, me siento orgullosa de lanzar ‘Hilando fino’, del que llevamos cinco capítulos”, señaló.

Compartió que la misión de este espacio es tener conversaciones con mujeres que hacen cosas interesantes en materia de género, y le ha permitido dar voz a feministas que habían estado en el centro del ojo público, que son valientes y tienen muchas cosas por contar.

Algunos de los podcasts que recomendaron son: “Las raras”, “Cuarenta cartas”, “Derecho remix”, “Tenemos que hablar”.